Mi viaje en la vida
es extraño y sin sentido común.
Hilos ocultos atan lugares y tiempos
en un tejido inteligible
para la mente ordinaria.
Con mis prácticas
regreso a mi centro de quietud
(más o menos)
y contemplo esta extraordinaria aventura.
Todavía me quedo perplejo:
¿quien soy, de dónde vengo, a dónde voy?
Pero ahora mi ignorancia
es plácida, la comienzo a gustar.
De repente un pájaro pausa en el borde de la ventana:
¿todo bien por aquí, querido?
¿Acaso me queda otro remedio
que aceptar y amar?
MI VIAJE EN LA VIDA