El fin de tu mundo
es ahora
cuando invitas al Todo
en tu interior.
Descubres que has inventado
este pequeño “yo”, al identificarte
con tu propio pensamiento
y disuelves al valiente Don Quijote
en el océano de la existencia.
Y sin embargo
este sabor íntimo de lo irreal
te acompaña como Dulcinea
con ternura y nostalgia,
enriqueciendo las aventuras
de una historia apasionada,
sin protagonista
y completamente virtual.
Ya no luchas
contra los monstruos de la mente
los abrazas como mascotas
de una inminente verdad
porque ahora Don Quijote
es libre
y camina sobre las aguas
del Despertar.
DON QUIJOTE